– Ribera observa con «cierto escepticismo» la reapertura del gasoducto Nord Stream
MADRID, 21 (SERVIMEDIA)
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, no contempla imponer ningún tipo de restricción en el consumo de gas y electricidad a los hogares y las empresas en el plan de contingencia que debe presentar a la Comisión Europea.
Así lo explicó Ribera en una entrevista en la Cadena Ser recogida por Servimedia, donde la vicepresidenta reiteró el rechazo de España a la propuesta de Bruselas de reducir un 15% el consumo de gas.
A este respecto, indicó que el plan pedirá un «comportamiento responsable» en términos de ahorro y eficiencia energética y contendrá recomendaciones, pero no incluirá «una obligación de que se tenga que poner el termostato a determinada temperatura».
En cuanto a la industria, adelantó que demandará una mayor flexibilización para permitir un uso del gas más inteligente entre los distintos sectores.
Además, incluirá medidas para facilitar una mejor gestión de todo el despliegue de renovables y para agilizar todos los procedimientos de las convocatorias del Plan de Recuperación vinculadas con el ahorro y la eficiencia energética. «Eso va más lento de lo que debería ir», lamentó la ministra, quien dio un toque de atención a las comunidades autónomas.
En cuanto a la reducción del 15% pedida por Bruselas, afirmó que supone «un esfuerzo sobredimensionado para España», ya que gran parte del gas se utiliza para generar electricidad y no puede reducir su uso utilizando más carbón.
Además, sostuvo que el consumo de gas en los hogares es mucho más limitado que en otros países europeos por lo que la reducción se debería producir en la industria. «No les vamos a dejar solos».
De hecho, afirmó que «no tenemos capacidad de reducir de forma absoluta nuestra importación de gas» y sostuvo que «el objetivo que nos correspondería de manera justa a efectos distributivos es que no hubiera reducción neta del consumo de gas».
«No vamos a jugar la carta de que no queremos ayudar», añadió Ribera, quien sentenció que lo que sucede es que «no estamos dispuestos a que se nos imponga sin preguntar algo que consideramos injusto cuando hay otras alternativas que pueden ser más eficaces». «Vamos a seguir dando la batalla», apostilló.
«Lo hemos hecho bien y eso no nos puede penalizar ahora frente a otros que optaron por una dependencia mucho más monolítica de uno o dos estados terceros y les ha atrapado», prosiguió.
Por otro lado, Ribera se refirió a la reapertura del gasoducto Nord Stream. «Es un alivio desde el punto de vista de la presión inmediata», destacó, aunque advirtió de que se debe tomar «con cierto escepticismo».
Según la responsable energética del Ejecutivo, lo previsible es «un Escenario en el que Putin juegue con los flujos de gas como ha venido haciendo desde hace más de un año y decida cortar el suministro en el momento que le parezca más conveniente».
